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Genial lo de "LA ENCANTARILLA" en la chapita de aviso |
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Escultura femenina sobre la cúpula de la alcaldía de Manhattan |
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Bell of Hope en la Capilla de San Pablo |
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Monumento a los marinos mercantes. Battery Park |
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Tirador-rifle |
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George Washington. Union Square Park |
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Dorada y encajonada (cúpula del New York Life Building, entre el New York Merchandise Mart y el One Mádison) |
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Chorro en Chelsea Market |
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Niño con paloma en el Maine Monument |
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Bandada sobre el Puente de Brooklyn |
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Nieve. 1 Brooklyn |
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Nieve. 2 Brooklyn |
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Elefante rosa |
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Puente de Brooklyn |
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Armas |
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Grifos y válvulas contra incendios |
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Placa conmemorativa |
Pues sí detalles, los detalles, yo creo que no es lo mismo ver, que mirar, que observar o contemplar. Cada uno de esos verbos define de manera distinta la forma en que procesamos la información que llega a nuestro cerebro a través del sentido de la vista; y seguro que hay más. A mí personalmente lo que más me atrae es observar y contemplar, porque ver es como lo esencial, ves y no te tropiezas, te sitúa en un contexto determinado que te da seguridad. Mirar ya eleva el interés por lo que estás viendo y concreta una primera fase de la observación. Ya, cuando observas, significa que estás poniendo atención sobre algo que puede ser de tu interés o no, pero que ha atraído tu atención al detalle. Y contemplar, en mi caso supone que fijado el objetivo de la observación, me atrae y dedico tiempo a su contemplación y disfrute. Pues eso. Detalles.
Una curiosidad: la estatua dorada que se entrevé entre las ramas de castaño en la cúpula del Ayuntamiento de Manhattan, se realizó tomando como modelo a Audrey Munson, la primera supermodelo de Estados Unidos, y fue utilizada como musa e inspiradora para muchas otras estatuas en Nueva York.
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