lunes, 2 de octubre de 2023

En Águilas... Gaviotas!!!

 















Pues eso, gaviotas, por todos lados, a tiro de dedo gordo, que con esa mirada no te atreves a sacar el pie de la sombrilla por si acá... Te vigilan desde todas partes, espantan a palomas y gorriones que se acercan más de la cuenta... Sin querer te viene a la memoria la película Los Pájaros, de Hitchcock y las miras de otra manera... no son aves pequeñas, no llegan a buitres, pero tampoco son gorriones, por lo que si se les ocurre a unas cuantas tomarla contigo, mejor resguardarse. 

Que no hay que irse a Hitchcock para recordar los reportajes de la tele en los que son protagonistas las gaviotas por asaltar al personal en los chiringuitos o en la playa para robarles la comida, o lo que puedan. Hasta meterse en las bolsas de playa he visto. Así que cuando te toca a ti el acoso, pues un poco incomodo sí que te sientes. Y viéndolas a un palmo y medio como te miran, sin quitarte ojo, pues eso, mal rollo. 

A lo lejos se ve llegar a puerto a los pesqueros rodeados por una nube de ellas. Los pescadores estarán acostumbrados a tenerlas zumbando alrededor, pero tu no. De repente algo llama su atención y al unísono alzan el vuelo y se adentran en el mar. ¡Que descanso!

N.A. Estas en concreto pertenecen a la especie de la gaviota argéntea, en distinto grado de madurez. Y recordando películas, ese día me habría gustado hacer de Sean Connery en la película de Indiana Jones y la Última Cruzada, espantando una bandada de gaviotas con su paraguas en la playa de Mónsul, no muy alejada, por cierto, de la que dio lugar a esta historia.

domingo, 17 de septiembre de 2023

Pequeñas Elecciones

Sierra de María... al fondo

Tengo que andar. Por mí no lo haría. Si me preguntas ahora mismo, prefiero lo que estoy haciendo,  divagar escuchando música clásica con pájaros, sentado cómodamente. Pero claro, con esta sexagenaria edad que me contempla y las exigencias del cardiólogo en cuanto al peso y el ejercicio, no queda otra que hacer de tripas corazón y, por lo menos, por lo menos, hacerle caso e intentar andar todos los días.

A ver, que tampoco soy un sedentario recalcitrante, pero es que hacer cosas de porque sí, como que no va conmigo, así que tengo que encontrarle algún aliciente al hecho intrínseco de darle a la pata para ponerme en marcha sin rezongar demasiado. 

Llegado al momento de ponerse en marcha, surgen diversas opciones en función de la climatología, la topografía y el tiempo disponible. También, aún sin dar un paso, me planteo si llanear o hacer algo más exigente incluyendo subidas (y bajadas) para hacer un poco de cardio, como se dice ahora. Lo más creativo resulta no repetir recorridos y alternar días de llaneos con otros más exigentes. El resultado viene a ser el mismo, al menos en esta época de calores, volver chorreando como una esponja y con la satisfacción de, al menos, haber sudado la camiseta.

Otra elección importante es la de si caminar escuchando música, o lo que sea a través de los auriculares, o escuchándote a tí mismo y al ambiente que te rodea. Pues según, sobre la marcha, aunque generalmente me decanto por mi mismo y alrededores. En ciudad tengo claro que es mejor no aislarse del entorno, no vaya a ser que te pasen por encima sin que te enteres. En el campo casi prefiero también ir a pelo; voy perdiendo oído con eso de la sexagenaria, y si aún oigo el canto de algún pájaro, el sonido del aire entre los árboles, o el rumor del agua en las escasas ocasiones que la encuentro, eso que me llevo.

Andar, andar, andar... Yo al menos soy incapaz de hacer eso solo, así que también elijo intercalar otras actividades en mi caminar. Si subo una buena cuesta y las pulsaciones empiezan a alcanzar un ritmo demasiado alegre, pues me paro y espero a que bajen mientras contemplo el paisaje y me seco el sudor que empieza a empaparme. Si me topo con un buen pedregal, le echo un vistazo por si encuentro algún fósil o piedra divertida. Si son bichos o animales, ni que decir tiene que pierdo todo el interés por la caminata y me enfoco a ellos. Si el paisaje merece la pena una parada, pues me paro y hago una foto, o dos. Y así, poco a poco, le voy dando sentido, mi sentido, a eso tan genérico que es andar.

Ah! que no se me olvide, será una bobada mía, pero durante los primeros quince o veinte minutos de cualquier caminata, noto como una goma invisible me liga a mi sillón y tira de mis entrañas produciéndome una sensación de fatiga que, hasta pasado ese tiempo no se disipa y me permite seguir sin la goma y sin agobio.

Y en esos ratos, cuando no hay goma, ni agobio, ni cuánto llevo, ni cuánto me falta, ni nada de nada, es cuando me pierdo en mí mismo y disfruto como un enano y no existe el tiempo ni el calor, ni la sexagenaria. Por eso vuelvo a salir. 

N.A. El: música clásica con pájaros, es un enlace a YouTube con una música preciosa.

Girasol

Vanesa de los cardos

Podalirio

Gato serio

Libélula (Anisóptera)


Argiope lobata

Barbitistes

Ammonite y otro

Fósil dentro

Fósil fuera

viernes, 15 de septiembre de 2023

Edificios I. New York

Torres de cristal

Rockefeller Plaza

St. Patrick´s. Catedral de Nueva York

Iglesia Presbiteriana en la 5ª Avenida

Cruce en la 5 AVE

Hotel Plaza

Hotel The Sherry-Netherland

Cruce de la E59 con Park Ave

Residence Inn

Park Avenue Tower

Hotel Waldorf Astoria

Iglesia de San Bartolomé. 1

Iglesia de San Bartolomé. 2

American Radiator Building

1095 Avenue of Americas. 1

W.R. Grace Building

1095 Avenue of Americas. 2

Biblioteca Publica N.Y.

Chrysler Building entre nubes

Charles Scribner´s Sons y Tower 49

Saks Fifth Avenue y St. Patrick´s. 

Hotel Sherry Netherland

Metropolitan Museum of Art (MET) N.Y. 1

Puestos de perritos calientes delante del MET

Sigo con mis recuerdos del viaje que hicimos a USA por "culpa" de Rocío, que nos arrastra inexorablemente donde su inquieto trajín la lleva. Con la ayuda del inefable Google, a quién pertenece esta aplicación desde la que escribo, y de otra que descubrí hace poco: Lens, que me permite identificar en muchas ocasiones lo que veo a través del objetivo de mi camara, puedo darle rienda suelta a este entretenimiento y compartirlo con quien le apetezca.