lunes, 3 de diciembre de 2012

La Casa de la Autopista

El curioso caso que ha ocurrido en la ciudad china de Wenling: la casa a cuyo alrededor se construyó una autopista y que ha permanecido así más de un año. 


Increíble pero cierto. Parece mentira pero esta es la situación en la que quedó 
una casa en la ciudad China de Wenling, en la provincia de Zhejian, región de Taizhou.

No a la expropiación. Este es el aguerrido propietario que
se negó a ser expropiado porque el dinero que se le ofrecía no
alcanzaba para construirse un nuevo hogar.

No es un efecto óptico. El resultado de la negativa a la expropiación fue 
así de sorprendente: aunque parezca un efecto óptico la realidad es que no 
lo era y la casa estaba justo en mitad de la carretera.

Curiosidad para viajeros. Lo insólito de la cuestión ha hecho que por tiempo
 la casa se convirtiese incluso en una especie de reclamo turístico o, al menos, 
en una curiosidad ante la que fotografiarse.

En solitario. Como se puede ver desde la terraza del edificio, la casa era casi 
la única que resistía en una zona previamente urbanizada por completo y que 
se había derribado para construir la nueva carretera.

Precariedad. Como suele ocurrir en estos casos al derribarse las viviendas junto 
al edificio todavía en pie éste sufrió serios problemas estructurales y de otro tipo. 
Como se puede ver en la imagen, el estado de la casa era lamentable.

Desde el coche. Esta era la vista que los sorprendidos 
conductores encontraban al avanzar por la carretera.

Al final hubo acuerdo. Finalmente, aunque hubo que esperar todo un año, 
el propietario de la vivienda consiguió imponer sus condiciones y la casa fue 
demolida, pero tras ser expropiada por un precio justo.

Y esta es la historia en imágenes de la tozudez de un solo hombre defendiendo sus legítimos derechos en un país en el que un suceso de estas características parecería inimaginable. Esto aquí no habría pasado, que se lo digan a los expropiados a causa de las autopistas y de los "aves", que muchas veces no saben si prefieren cobrar en "mortadelos" o en dinero del "Monopoli", antes que pelear con la administración por un "justiprecio" justo.

Fuente: L. Digital
Fotos: Cordon Press

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