Aquí y Allá

Vitoria

La Puebla de Don Fadrique. Granada

Norte y sur. En las provincias vascongadas la mujer embarazada ha alcanzado la categoría de minusválido, por lo menos para estacionar su vehículo. Algo así como minusválida de temporada. Tanto es así, que la señal de prohibición, en principio solo prevista para facilitarle las cosas a los minusválidos de siempre, una vez repintada para hacerle un hueco al emoticono de embarazada, amplía su excepción a los dos colectivos. Que para eso son vascos y piensan con la cabeza, y que nadie salga ahora con lo de la discriminación positiva y otras zarandajas.

En el sur, las señales son más de andar por casa. Esta de "Puebla-Urbano", del tamaño de un culo de vaso mediano e incrustada en la pared a una altura donde ya empieza a doler el cuello al mirarla, tiene un toque artístico-cerámico-rústico, muy acorde con el entorno. Lo que no tengo claro es si la leyenda "Andalucía" iba incluida de origen o es una aportación espontánea. ¡Un arte que no se pué aguantá!

P.D. Especialmente dedicado con cariño a una embarazada que es cualquier cosa menos minusválida. Porque ella lo vale.